Hallan los cuerpos de 2 menores que fueron asesinados a manos de su madre por un supuesto "Pedido de Dios"
María Gombau, una mujer de 25 años asesinó a sus dos hijos, Amiel e Ixchel, quienes fueron encontrados enterrados cerca de una casa en ruinas perteneciente a Godella. Según la autopsia ambos sufrieron grandes contusiones y rasguños en todo el cuerpo, siendo ESTA la causa de sus muertes en ambos casos. La madre fue detenida y juzgada por la justicia, siendo luego trasladada a un distrito psiquiátrico puesto que se le hicieron cuatro exámenes, los cuales concluyeron que María actuó en medio de un brote psicótico.
Se descubrió que María participaba en una secta junto a familiares, vecinos e incluso su pareja. Se presume que esto le llevó a asesinar a sus 2 hijos debido a que, según ella, Dios le pidió esto para que después ellos resucitaran.
El día del asesinato, alrededor de las siete y media de la mañana, la pareja de María empezó a discutir con ella debido a que no encontraba a los niños. María salió corriendo y él fue tras ella. Esto alertó a los vecinos debido a que ambos estaban desnudos, entonces llamaron a la policía del lugar debido a que pensaban que era algún tipo de agresión sexual. La policía habló con la pareja de María para aclarar lo ocurrido y, posteriormente, empezaron a buscar a María y a sus hijos. Después de una intensa búsqueda encontraron a
María y ella misma guió a los policías a las tumbas que ella misma había elaborado. Las tumbas (muy poco profundas) estaban a unos 50 metros de las ruinas en las que vivía la familia.
Y cabe añadir que pese a que María fue trasladada a un centro psiquiátrico, esto no significa que quedará en libertad pues su reclusión será igual al tiempo del delito cometido. Esto significa que por el delito de asesinato deberá lidiar con 20 largos años en prisión.